Esta afirmación (Un perro cansado es un perro feliz) ha hecho más mal que bien en las familias caninas. A menudo, es la culpable de los perros sobreexcitados por jugar

Si estás buscando dónde dejar a tus perro en adopción, te recomiendo que primero agotes todas las opciones posibles:
- Si tu perro está enfermo y no puedes cuidarlo, visita a tu veterinario
- Ante cualquier problema de conducta, habla con un educador canino y un etólogo clínico
- Busca ayuda en asociaciones, centros especializados y personas cercanas a tu familia, si estás pasando una mala situación económica
Un perro no es un juguete, ni un adorno, ni una alarma. Él o ella daría la vida por ti. Un perro puede tener problemas de salud y de conducta, pero se convertirá en un miembro más de la familia. Es importante que, antes de adoptar, pienses en todo esto, para no seguir haciendo crecer el problema del abandono en nuestro país (ni en ningún país).
Te recomiendo también que leas algunos de los artículos siguientes, que explican la dura realidad que enfrentan voluntarios/as, perreras y protectoras de animales, como:
- La dura realidad de las protectoras de animales, en FAADA
- Información extra sobre adopción y abandono, en No lo dejes al azar
Situaciones por las que los perros se dan en adopción
Antes de tomar decisiones drásticas, como dar al perro en adopción, debemos valorar siempre la situación con calma y tratar de analizar en detalle todas las opciones que existen.

Según la RSCE (Real Sociedad Canina Española) mantener a un perro tiene un coste anual de 1.250 €, que se dividen entre alimentación (600 €/año), veterinario regular (200 €/año), otros gastos (200 €/año), peluquería e higiene (150 €/año) y otros gastos veterinarios (100 €/año).
Por norma, las situaciones más habituales que nos encontramos son:
Problemas económicos
Es el tercer motivo de renuncias y abandonos (un tema que trataré al final del artículo) debido a la falta de poder adquisitivo de las familias o a cambios que desequilibran el presupuesto económico. Por lo tanto, es importante tener presente que nuestra obligación es responsabilizarnos del animal a las duras y a las maduras, como suele decirse. Además, la media de gasto anual no evita que puedan existir emergencias veterinarias u otros inconvenientes a lo largo de la vida de tu perro o animal de familia.
Problemas de salud y defunción
Los guías que viven solos con perros, gatos u otros animales son más susceptibles de tener que darlos en adopción ante una eventualidad. Te recomiendo que, aunque a veces no apetezca, te informes sobre esta problemática.
Evalúa cómo terceras personas podrían cuidar de tus perros o mascotas si aparecen problemas de salud o debes ingresar en un centro. En esas circunstancias, ¡seguro que vas a querer lo mejor para tus animales!
Recuerda: ni los perros ni los gatos ocasionan ningún problema con los embarazos ni son una responsabilidad que podamos desechar tras un cambio personal o laboral en nuestra vida.
Tienes más información sobre este tema en los artículos siguientes:
- Dónde dejar a mi perro si me pongo enfermo (también Covid-19)
- ¿Qué pasará con mis animales cuando yo muera?
Convivencia compleja en la familia
A veces, la convivencia no es como desearíamos. La educación de un perro se alarga durante toda su vida y el carácter de cada individuo no tiene nada que ver con el de otro animal (sí, la selección de razas nos permite obtener unos patrones concretos, pero no es una ciencia exacta).
Debemos tener presente que un perro es sinónimo de alegría, entretenimiento, complicidad, juego y diversión, pero también de paciencia, esfuerzo, momentos complicados y trabajo. Antes de dar en adopción a tu perro u otro animal por un problema de conducta, ten presente que:
- Existimos educadores caninos (y felinos) y etólogos clínicos que podemos ayudarte a mejorar la convivencia y a crear una relación de familia equilibrada, pero TÚ te vas a tener que ESFORZAR
- Cada animal tiene unas particularidades: no, tu perro Tobby III no será nunca como Tobby I, aunque los dos se llamen Tobby y sean de raza pastor alemán: querer a alguien también es ¡aprende a querer sus imperfecciones! (Eso no quiere decir que no podamos entrenar, educar y modificar conductas, pero nadie es mago aquí: no podemos convertir a un perro en otro perro.)
Camadas inesperadas y embarazos no deseados
La llegada de cachorros es otro de los motivos más comunes por los que muchos perros se dan en adopción.
En el mundo canino y el contexto veterinario, existe una tendencia mayor a estudiar cada caso previo a la esterilización. En protectoras, en cambio, es una obligación legal debido al enorme problema de saturación que existe.
La realidad es que, la mayoría de las veces, una esterilización bien planteada es un seguro frente a las camadas indeseadas y otros problemas asociados: territorialidad, ansiedad, infecciones…
Opciones renunciar a tu perro de forma ética
Si estás decidido/a a dar a tu perro en adopción, te pido que valores todas estas opciones: la mayoría son complementarias y puedes llevarlas a cabo en paralelo.
#1. Contactar con amigos y familiares
Hablar con el núcleo cercano nos servirá para tratar de entendernos y buscar ayuda. Son muchas las adopciones y cambios de titularidad que se dan gracias a esta alternativa, permitiendo al animal un cambio menor en sus rutinas frente a ser renunciado en una protectora o viajar a otro país.
Pese a la situación, la posibilidad de que el animal pase a vivir con un amigo o un familiar facilita que exista una relación previa entre el perro o gato y el nuevo guía. Además, aunque no se puede generalizar, probablemente el anterior propietario/guía podrá seguir viendo al animal.
Si estamos decididos a dar en adopción a nuestro/a compañero/a, hablar con nuestra clínica veterinaria también puede ser una buena opción, puesto que conocerán al animal y sabrán si existe la posibilidad de reubicarlo en otra familia.
#2. Compartirlo en tus redes sociales
Puede que llevar el caso a las redes suponga un montón de comentarios de todo tipo, pero también nos ofrecerá un rango mucho mayor de exposición de la situación. Por norma, muchas páginas y comunidades se centran en buscar una solución e intentan mantener controlada y moderar en su comunidad en relación con opiniones que no aportan valor. Por descontado, solo tú conoces tu situación, pero (no olvides que) cada persona es muy libre de tener una opinión propia acerca de que estés dando a tu perro o gato en adopción.
#3. Utiliza plataformas de adopción en línea
Regístrate y trata de encontrar una familia a través de esta nueva alternativa. Por norma, portales como Miwuki y Cambia un destino, ayudan a muchas familias a dar en adopción a perros y a facilitar los procesos. Es una opción moderna y complementaria al trabajo de los centros de protección.
#4. Llevarlo a un centro de protección animal
Esta es (casi) la peor opción que existe. ¡Y eso que el trabajo de personal y voluntarios suele ser modélico, pero sigue siendo un gran trauma para los animales!
Los centros de protección suelen estar colapsados (falta de espacio, varios perros por jaula, pocos recursos…) y son lugares de gran estrés y ansiedad. En comunidades como Cataluña, directamente es complicado poder dejar animales en una protectora debido a la saturación. Por descontado, la Covid-19 no ha ayudado.
En cualquier caso, intenta invertir un poco de dinero en otras opciones primero, como residencias para mascotas o cuidados profesionales. En paralelo, puedes buscarle una buena adopción.
Si terminas llevando a tu perro a un centro de protección, mejor siempre a una protectora que a una perrera en aquellas comunidades donde todavía no está activa la Ley de sacrificio cero.
Ten presente que esta opción es, muy a menudo, una condena para tu perro y solo hay una opción peor: el abandono.
Abandonar a un animal es condenarlo a sufrir y a morir
Tómate tiempo. Evalúa con calma. Toma una decisión razonada de la que no te arrepentirás: dar en adopción a tu perro o gato es algo que debes MUY claro antes de dar el paso. Por el contrario, abandonar a un animal a su suerte es un acto cruel que lo condena a sufrir y puede que hasta morir.
En el caso de que no puedas cuidar de tu perro, o no hayas encontrado el modo o las fuerzas, opta siempre por las opciones anteriores. Abandonar es incrementar la triste realidad en la que España sigue a la cabeza con más de 150.000 casos de abandono anual.
Te dejo aquí algunos enlaces que puede que te inspiren:
- De cómo tu perro cambió mi (nuestra) vida (Javier Ruiz, 2015)
- Campagne 2016 – 30 Millions d’Amis #Nonalabandon
- Campagne 2017 – 30 Millions d’Amis #Nonalabandon
- Campagne 2018 – 30 Millions d’Amis #Nonalabandon
- Fundación Affinity 1998: Él nunca lo haría (y vídeo de campaña)
Si necesitas consejo, puedes escribirme a través de la sección de Contacto de Dog Ventura, así como a jruiz @ dogventura .com
Comments (02)